La Siega, la Torta de cebada, los Peones…

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La siegaLa siega en el pueblo solía empezar allá para comienzos del mes de Julio. Se iniciaba con las cebadas, que en los primeros años después de la guerra había que llevarla a la era recién segada, trillarla y llevar a moler para conseguir harina de cebada y tener las famosas “tortas de cebada”, ya que el pan de trigo del año anterior escaseaba e incluso ya no lo había.
Seguidamente a la cebada se segaba el trigo mezclado con centeno, elemento cereal que facilitaba hacer una especie de envoltura formando los llamados “haces o gavillas”.
Finalizaba la siega con la avena, y a veces también la escaña. Solía terminarse para Santiago (25 de Julio).
Los cereales, segados y recogidos en haces o gavillas se depositaban en una parte del pedazo (fuera de donde solían pasar las riadas) formando los característicos “tresnales”, que convenientemente colocados permitían contar la cantidad obtenida por grupos de diez haces.
Generalmente todos los miembros de la familia participaban en la siega: mujeres, hombres e incluso niños que a primeras horas de la mañana partían hacia el lugar del término que tocaba ese día: La Torre, el Prao Navarro, La Cañá de la Matanza, el Campo…. Todo el personal  con mulos, burras, yeguas convenientemente aparejadas transportaban sobre sus “serones” la comida del día, el agua en las cubetas y las botas de vino junto con las “corvellas”, zoquetas, manguitos, dediles, cuerdas (vencejos).
Algunas familias disponían de una “agostera”, chica casi siempre, encargada de llevar la comida a los segadores empleando para su transporte generalmente una burra. Esta agostera con la antelación suficiente llegaba al “tajo” o lugar de trabajo, allí después de haber buscado la sombra convenientemente en algún pino, sabina o encina próximas, ponía la comida en común y la colocaba en un mantel sobre el suelo, los alimentos se colocaban en una fuente (plato grande), único recipiente para todos. Las comidas cocinadas solían ser gazpachos, patatas fritas, almortas, gachas para el almuerzo, …. La comida casi siempre cocido, potaje. Como merienda, “merendeta” entoces se tomaba el llamado “sopanvino”: pan partido en trozos, con vino abundante y azúcar.
Aquellos propietarios que poseían mayor extensión de tierra y los miembros de la familia no eran suficientes para realizar esta faena,  en ocasiones se veían obligados a contratar los servicios de grupos de peones o segadores, que procedían de diferentes pueblos de la comarca, y una vez terminada la siega se trasladaban a otros pueblos de cosecha más tardía hasta finalizar la campaña de recolección.

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